La Luz de la Tierra

¿Os imagináis como puedes ser ese lugar de donde emana la energía de la Tierra, la esencia de la Naturaleza??

Érase una vez, el Reino de la Luz de la Tierra.

Una hermosa luz blanca iluminaba sin descanso aquel mágico lugar, aquella dimensión donde sólo cabia la abundancia, la magia y el agua pura de manantial.

Una hermosa y gigante cascada abastecía a todas las especies de plantas, árboles, arbustos, minerales y demás Seres de los que vibraba la vida y el Amor más puro.

Luces de colores, como volátiles chispas jugaban en el agua mientras luciérnagas y mariposas de colores vestian con alas el espacio y el tiempo.

El aroma estaba en el aire, transportado por el bello aleteo de las hadas, que traían la esencia más pura de las flores.

Diferentes Seres Elementales, de todas las Naturalezas e infinitas realidades, trabajaban día y noche cuidando y guardando que todo estuviera en orden. Desnudos y apenas visibles de tanta pureza, custodiaban las semillas de la Tierra que se extinguían por la inconsciente mano del Ser Humano.

Ellos eran los vigilantes de esas semillas que en un futuro, serían de nuevo cultivadas para el bien de la humanidad, en un futuro donde la vida volvería a ser vida y no destrucción.

Las conservaban en urnas de cuarzo rosa y blanco para mantener todo el Amor en ellas.

Esos Seres transparentes, se clasificaban por grupos según su elemento Tierra, Aire, Fuego y Agua.

Las semillas y los animales terrestres eran protegidas por los Seres de la Tierra, los Seres del fuego se encargaban de proteger los minerales mediante la energía del Sol, que les mantenía con esa energía especial para después ser usados como herramientas de curación, los Seres del aire mantenían a las aves y Seres alados en completa libertad y armonía y los Seres del agua, guiados por la energía del Manantial Central de donde bebían todas las especies, cuidaban las plantas, y árboles, y algunas especies que ya habían desaparecido pero que pudieron ser rescatadas de la superficie terrestre para evitar su extinción total.

Estos Seres alimentaban a esas plantas con el agua de la cascada para que almacenarán la información más profunda y cuando la humanidad estuviera preparada, servir, curar y sanar a todo aquel que precisara de sus virtudes, siendo respetada y honrada, y eso sólo puede ocurrir cuando el Ser Humano, sea eso, Ser y Humano.

La chispa de la vida en ese lugar, es todo el conjunto de elementos y Seres cuya única dedicación es cuidar de todo lo que el amor más puro podía haber creado, con la inocencia de un niño y la sabiduría de una anciana, con el corazón del más noble y pacífico maestro, y la belleza de la caricia de una brisa en primavera.

La Tierra que pisamos, las plantas y animales que nos acompañan son portadores de esa hermosa Luz, tan generosa y curativa.

La creatividad de la Madre Naturaleza no tiene límites, su grandeza y belleza nace de ese lugar donde sólo un Ser limpio y de buen corazón, es capaz de acceder a el para recibir la verdad de la vida natural en la Tierra y traer la información para que en forma de leyenda, sea transmitida con el fin de despertar las consciencias y llenar los corazones de esperanza y luz, a la espera de la Nueva Tierra, libre y en paz.

Todos los elementos de la Tierra que pisamos emanan esa Luz , tienen su Don y la capacidad de sentir nuestros corazones, así que, a partir de ahora, agradece, si no lo haces ya, cada vez que tomes contacto con la Naturaleza. Cada alimento, la lluvia y el Sol, esa hormiga y esa molesta araña, también son Seres de Luz.

Cuentan que esta leyenda no es fantasía, cuentan que alguien ha podido ir a ese mágico lugar y ha podido hablar con los Seres que allí habitan. Cuentan que no hay nada en la imaginación que no pueda existir en la realidad...

Así que, ahora, tu decides si creer o no creer la verdad de esta hermosa historia.

Cuentan...que si miras durante un tiempo una flor y después cierras los ojos, puede ser que alguno de esos Seres quieran ser vistos.