ELOGIO A UN SABIO

ELOGIO A UN SABIO

Me pregunto qué podría contarnos este sabio y viejo árbol, tras tantos años embelleciendo nuestra vista y nuestros sentidos.

Quizá una hermosa historia de Amor entre dos bellas Almas que se reencontraron en este bello lugar; o quizá la historia de una dura y vendedora batalla de guerreros astures como primeros pobladores de tan generosas tierras, quizá... Inviernos fríos y veranos calurosos esperando que el otoño le diera de beber antes de que el invierno sacudiera sus robustas ramas con oleadas de vientos casi huracanadas.

Bellos atardeceres e iniciáticos amaneceres que cada día dan forma a su bella estampa y le otorgan esa Luz, que durante años devuelve con dulzura y Amor a sus visitantes ignorando tanto poder y sabiduría.

Todos los abrazos recibidos de tantas personas deseosas de sentir su magnificencia y templanza, su vigor y artes curativas para el corazón, su vibración capaz de convertir a todos los Seres en peregrinos del Alma.

Capaz de ayudar a ese niño que osado pudo quebrar alguna rama jugando a descubrir, o calmar el llanto de una madre que espera el regreso de su hijo soldado tras la guerra, o darle aliento a ese anciano cuya vida está a punto de trascender.

... Tan bella es su presencia que abruma mi corazón curioso ...

Árbol que nutre a otros más, que da cobijo al sediento y amor al solitario.

Árbol que roza la divinidad, y si no la roza mínimo la representa, árbol merecedor de elogios y domador de misterios.

Árbol sagrado celta, y guía del camino espiritual al que acercarse para meditar y buscar en nuestro más profundo Ser.

Los antiguos druidas, oficiaban sus ceremonias a la sombra de los tejos y reconocían su verdad como árbol de la inmortalidad del Alma.

Su energía es la gran orientadora hacia otros mundos ...

Su potencial es infinito, pues refuerza la compenetración con la fuerza y la energía de la Naturaleza.

Leal compañero y amigo del hombre pues su Gran Poder nos transmite impulso y equilibrio interior, entereza para superar momentos de desasosiego, y paz mental para el buen descanso.

Cuan ingenua puedo ser cuando creo saber sobre su maravillosa acción con la gran Madre, pues su Ser es tan elevado y misterioso que solo podría sentarme junto a sus pies y vivir de Amor entre sus brazos.

Deseo fusionarme en el, quedarme allí, sin sed ni hambre, sin lastres ni ropajes, sin miedo y con todo el coraje para seguir mi camino sabiendo que "solo se que no se nada" y que todo ya está escrito.

Gracias, gracias, gracias!!!